Si tuviese que pedir algo, pediría cinco horas a tu lado. Cinco horas serían suficientes para saciar las ganas que tengo de abrazarte. Cinco horas para convencerte de que la chica a la que tanto has buscado durante todo este tiempo, la tienes delante y soy yo. Cinco horas, para que te mueras por besarme, para que me agarres con fuerza las manos por miedo a que me vaya.
Por favor, dame cinco horas y prometo aprovecharlas desde el primer hasta el último segundo. Guardaré en una pequeña caja todo aquello que lleguemos a considerar recuerdos. Haré que esos 18000 segundos que pasemos juntos sean los mejores segundos de toda nuestra vida, nuestras cinco cortas y largas horas.
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